Los alumnos durante esta semana van a realizar, por niveles, un trabajo sobre el Adviento, con el fin de tomar conciencia de la importancia del acontecimiento que se avecina, y no se queden con la pobre y lamentable idea que de la Navidad transmite este mundo de consumismo y materialismo que nos rodea, y nos proyectan los medios de comunicación, perdiendo el verdadero sentido de la "NAVIDAD", ese sentido de amor y misericordia hacia los más vulnerables, para lo que se hizo hombre el mismo Dios, Él que quiso hacerse uno de nosotros para darnos ejemplo de vida, y todo para fuéramos felices haciendo felices a los demás. Y aquí los tenemos manos a la obra:
El amor es comprensivo y servicial; el amor nada sabe de envidias, de jactancias, ni de orgullos. No es grosero, no es egoísta, no pierde los estribos, no es rencoroso. Lejos de alegrarse de la injusticia, encuentra su gozo en la verdad. Disculpa sin límites, confía sin límites, espera sin límites, soporta sin límites. El amor nunca muere. (1 Cor 13, 4–8)
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